Sunday, May 08, 2005

Un Bebé en palacio

No, no te has equivocado, no voy a comentar la última comedia (todo-a-100) importada de allende los mares, ni tampoco me refiero a nuestro ilustrísimo monarca, que bastante tiene el pobre, que desde que le enseñaron a leer no para de hacerse sus cosas en la cama.
Este, vuestro humilde narrador, se ve de nuevo en la forzosa tarea de comentar una noticia que ha llegado a sus oídos avizores de la manera más casual posible: los medios de comunicación. Con su entrañable objetividad nos anuncian:

Associated Press.

MADRID - La princesa Letizia de España espera a su primer hijo, cuyo nacimiento está previsto para noviembre, informó el domingo la casa real.

Estupendo cada vez se lo montan mejor los mercaderes de información de los media y no paran de pilar un chollo mediático tras otro...
Como no somos unos ingénuos sabemos que los periódicos son como las demás empresas, que tienen como único fin sacar beneficios para sus accionistas... ese es el mensaje.
Por eso no me extraña pensar que los grandes media se hayan tranformado en órganos de propaganda del orden establecido.

Así pues, el interés inmediato de la audiencia es lo que ahora se denomina "actualidad".

El único criterio que se impone a la hora de elaborar la información es el resultado: la venta o la audiencia; llegando a admitir "nosotros no vendemos productos: vendemos audiencias".
Hay alguien que encuentre contradictoria la noción de ética de la información con la obsesión comercial?
Nos encontramos entonces con un periodismo sumido en la banalidad absoluta, conveniente y sin asperezas, "sin riesgo y desprovisto de esperanza, pero rentable..."

En fin, no se si estoy preparado para lo que se nos avecina... un mar de ecografías en las portadas de los informativos, adivinos casposos elucubrando sobre el sexo del nonato, sus regalos, su futuro nombre, millares de fotos y de clichés y de elogios y de sonrisas maternales... y que hayan tantas guillotinas oxidándose...

Este es el espíritu de nuestro tiempo: el espíritu de la insignificancia.




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